No es que dichos alimentos sean milagrosos, sino que contienen las llamadas ‘calorías negativas’ –sobrenombre que hace referencia a que requieren más energía para digerirse que las que aportan-, que ayudan a quemar la grasa y de este modo permiten reducir los kilos que nos sobran.
Repollo: Es un gran anticancerígeno que contiene muchas vitaminas y minerales que ayudan a metabolizar mejor las grasas.
Naranjas: Los cítricos no solo reducen los niveles de insulina, también promueven la pérdida de peso.
Remolacha: Contiene betanina, una sustancia que mejora la actividad del riñón y por eso permite eliminar más grasas.
Manzana: En su piel contiene pectina, una sustancia gelatinosa que retrasa la digestión y genera mucha sensación de saciedad y absorbe las grasas.
Cebolla y ajo: Ambos aceleran la actividad del metabolismo. Pero ¡cuidado con el aliento!
Lechuga: Esta hoja verde tiene hierro y magnesio y ayuda a quemar esas grasas de más que hay en el organismo.
Carnes magras: Las carnes son una fuente clave de proteínas para tu dieta. Prefiere carnes blancas como el pollo y retira la piel, que sólo aporta grasas.
Mostaza: La mostaza es lo más indicado para evitar las calorías de más de los condimentos y a su vez, acelera el funcionamiento del organismo eliminando más fácilmente las grasas.
Avena: Los cereales que contengan avena dan la sensación de saciedad y disminuyen el colesterol malo.
La canela, el jengibre y pimentón: Son excelentes aliados de tu peso porque también eliminan las grasas y dan sabor a los platos sin tener que recurrir a un exceso de sal.
No olvidar mezclar estos alimentos con una buena rutina de ejercicios.
FUENTE: The Gourmet Journal
- 16/11/2012 No comments Posted in: DOSSIER Tags: dieta, featured', investigación