Se han puesto muy de moda en el mercado la aguas saborizadas, como una opción en lugar de las gaseosas.
Como bien dice el nombre, son aguas que tienen sabor. En los licuados, en cambio, la pulpa de la fruta forma parte del mismo. Las aguas saborizadas se tamizan para evitar justamente eso.
Pueden prepararse con agua hervida o agua mineral. La base también puede ser un té o una infusión. El proceso es simple y es el mismo más allá de los ingredientes que se utilicen. Si son frutas grandes (mango, peras, manzanas) se machacan, si son frutas chicas pueden licuarse (frutillas), si son cítricos pueden exprimirse y usar a la vez sus cáscaras o ralladuras.
Cualquiera sea el método, hay que dejar la fruta en el agua algunas horas antes de pasarla a través de un tamiz fino y dejarla escurrir hasta que largue toda el agua.
Estas aguas pueden hacerse con frutillas, peras, mango, manzanas, naranjas, pomelos, mandarinas, lima y otras tantas frutas. Con pepinos se prepara un agua muy refrescante. Se les puede agregar canela, jengibre seco o rallado, lemon grass y menta. Para endulzarlas, usar algún edulcorante, azúcar o miel.
Servirlas bien frías.
Las aguas de la imagen: la botella más grande es un agua de mango y jengibre con miel, la otra de pomelo, naranja y menta y la más chica de frutillas.
IMAGEN: © MISANPLAS
- 11/06/2012 No comments Posted in: BEBIDAS, COMER EN CASA Tags: aguas, featured', frutas